La azúcar blanca es uno de los alimentos procesados más dañinos para el cuerpo. Básicamente, una dieta con un alto contenido de azúcar te puede predisponer a padecer eventos cardiovasculares, diabetes y obesidad. Entonces, conoce la influencia del azúcar sobre tu salud.
¿Qué es el azúcar?
En primer lugar, la azúcar blanca, también, denominada sacarosa o azúcar de mesa, es un disacárido, es decir, que está compuesto por una molécula de fructuosa y una de glucosa, la cual proviene de la caña de azúcar.
Por otro lado, parte de sus características es que representa una fuente de calorías significativa, pero que carece de valor nutricional. Lo anterior quiere decir, que en una pequeña porción hay una gran cantidad de calorías y que no están aportando algún oligoelemento.
Al mismo tiempo, el azúcar se puede clasificar de acuerdo a su grado de refinación, la cual tiene que ver con el porcentaje de glucosa que contenga. De este modo, puedes conseguir azúcar morena, azúcar blanca y azúcar rubia.
¿Azúcar en los productos procesados?
Cabe mencionar, que la gran mayoría de los productos procesados contienen azúcar, pero no vas a leer en la etiqueta la palabra azúcar, ya que puede tener otros nombres.
En relación con lo anterior expuesto, la recomendación es que puedas leer la etiqueta de los alimentos procesados, algunos de los nombres que puedes visualizar son los siguientes.
- Glucosa
- Maltosa
- Fructuosa
- Dextrosa
- Maltodextrina
- Edulcorante de maíz, de arroz, entre otros
Ahora bien, es aconsejable que revises la cantidad de azúcar que contiene el producto, ya que la influencia del azúcar en tu salud comienza cuando consumes una cantidad exagerada y continua de azúcar.
¿Cuáles son los efectos negativos del azúcar en la salud?
Aunque, los efectos del azúcar puedan evidenciarse en múltiples sistemas, es en el cerebro donde existe un mayor impacto.
El estímulo neuro-hormonal que genera el azúcar en el cerebro es activar el sistema de recompensa. Lo que ocurre es que este sistema es un conglomerado de acciones endocrinas que tiene como fin asociar una situación con una sensación de placer.
En otras palabras, la acción de “comer azúcar” causa una sensación que te hace feliz por la síntesis y liberación de un neurotransmisor llamado dopamina, por lo cual eres propenso a querer generar en un futuro nuevas experiencias similares.
La principal consecuencia es que cada vez vas a necesitar consumir más azúcar. Por su parte, otra influencia del azúcar en tu salud es que en el cuerpo todos los hidratos de carbono se transforman en glucosa, la cual se reserva en el hígado, el músculo estriado y los adipocitos.
En este sentido, cada reservorio tiene un límite, de modo que cuando ya el hígado no tiene capacidad, se almacena en los adipocitos. Esto representa un factor de riesgo para el desarrollo de obesidad.
Adicionalmente, para que el azúcar pueda ser usado por la célula es necesaria una hormona que se llama insulina, el problema es que el azúcar hace que el páncreas produzca niveles muy altos de esta hormona, lo cual con el tiempo es contraproducente.
Problemas cardiovasculares y metabólicos producidos por el exceso de azúcar
El azúcar es un enemigo del corazón y las arterias. El consumo periódico y desmedido de azúcar genera obesidad, uno de los factores de riesgo para la aparición de enfermedad coronaria, enfermedad aterosclerótica e hipertensión arterial.
Este producto procesado daña la pared muscular de las arterias. Además, se relaciona con una concentración sérica de colesterol y triglicéridos elevados.
La resistencia a la insulina es otro de los problemas que pueden presentarse y que si no se trata puede con el paso del tiempo ser el inicio de la diabetes.
Escrito: Dra Maria Fernanda Alayon