Los adolescentes pueden ser empoderados para transformar y establecer relaciones de género basadas en el respeto mutuo y la no violencia
“Es necesario involucrar de manera activa a más jóvenes y adolescentes. Si conocemos nuestros derechos, estaremos preparadas para defenderlos porque todos y todas somos iguales y merecemos vivir una vida libre de violencia. Invito a más jóvenes a que se informen, participen y hagan escuchar sus opiniones y puntos de vista”.
Estas son las palabras de Ayline Huamán, una niña de 12 años de la organización no gubernamental GirlGov Perú-
Debemos dejar de ver a los niños, niñas y adolescentes como objetos pasivos o solo receptores de información y cuidados. En cambio, debemos incluirlas e incluirlos como agentes de cambio, con voz en el diseño e implementación de las acciones que les conciernen. Ellas y ellos experimentan VG y diferentes desafíos en su vida diaria y son las y los verdaderos expertos y expertas en el campo.
Las y los adolescentes son fundamentales para lograr el cambio de las normas sociales para prevenir la VG, dado que la adolescencia es una etapa de transformación y una ventana de oportunidad en la que las personas somos más influenciadas por el entorno. Es así que, las y los adolescentes pueden empoderarse para transformar y establecer relaciones equitativas de género basadas en la igualdad, el respeto mutuo y la no violencia. En este sentido, gobiernos y organizaciones que trabajan en América Latina y el Caribe (LAC), nos brindan las siguientes lecciones aprendidas acerca del trabajo con jóvenes para prevenir la VG:
Es importante incluir las voces de las y los adolescentes en el diseño y desarrollo de las actividades para prevenir la V G . Por ejemplo, en Perú, aproximadamente 3 de cada 5 adolescentes han sufrido algún tipo de acoso virtual. Para responder a este problema, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP) y el Banco Mundial organizaron un taller virtual que contó con la participación de más de 150 adolescentes, incluida Ayline, sobre la VG en línea. El taller incluyó la co-creación con las y los jóvenes con base en historias y guiones propuestos por ellas y ellos, abordando temas como el acoso en redes sociales y los estereotipos de género. El MIMP también co-creó una serie de cómics centrados en la prevención de la trata de personas, esta vez con la participación de jóvenes migrantes. Estos cómics fueron ampliamente compartidos en las redes sociales como: Instagram, WhatsApp.
Fuente: MANUEL CONTRERAS-URBINA
DIANA CATALINA BUITRAGO OROZCO
